User:Pavhlo

From Creative Commons
Jump to: navigation, search

Ambigüedades

Las preguntas revolotean en mi cabeza y mis ojos aunque abiertos no ven nada, un paso firme es frágil existe una gran muralla, las hojas secas caen bailando al compás del viento, lo que no esta se palpa como ciertas respuestas que en la nada se hallan, cuerpos inertes vuelan simulando en el aire una caricia y la vida tiene noticias de que se va a acabar, mientras que al son de una mentira nace una alegría y lo disonante de la verdad se pierde en el infinito como estrella fugaz, el eterno contraste de la guerra y la paz en su junto caminar, la esperanza de un amor para nunca acabar inmediato a la resignación del final, las huellas de arena en la mente que el olvido como la mar borrara, la ausente presencia de una monótona compañía, el epicureismo de la soledad, la felicidad no exenta al dolor, la razón sin discernimiento con el fermento excitante que devora un alma y la calma que solo la muerte traerá, la vida en su sutil contraste entre mentiras verdaderas y supuestas verdades.




Nace un beso

Con un suave tono de dulzura corroyendo cualquier vestigio de tristeza, maldad, amargura, con matices de colores felices, cual arco iris que bendice su existencia, tu presencia que germina en mi corazón flores que llena de mil olores el manantial de alegría que creas en mi vida.

Traes contigo el génesis de mi felicidad, el despertar de un sueño bonito el cual tú haces realidad, y si no estas, pues te recreo en mi cabeza y tu presencia llega en la delicadeza de la suave brisa y tu sonrisa la puedo palpar.




Tu sonreír

Te veo, y tus ojos reflejan fantasía, como la que refleja el sol de día, como la luna en la noche, cual derroche de mil golosinas pintadas en el cielo con estrellas y luceros y un toque de alegría.

Lo que haría si no estas presente, es conservar en mi mente una fotografía de los momentos en los que aunque ausente tu sonrisa esta perenne como el agua en la mar viva.

Tu sutil sonrisa, aunque disimulada da color a la vida.

Es luz posada en un clavel, con belleza delicada deja ver, las mil golosinas que sólo tu rostro puede hacer.

El saber que sonríes es hacer de ese gesto una estrella, es tomar de un jardín la flor mas bella es contornear esa belleza y saber que no tiene fin, es el embeleso de sentir que irradias luz como una lejana estrella, pero estas cerca de mí.

Sentir que en tu rostro una sonrisa se crea cual hermoso arco iris es sentir que vale la pena vivir solo por verte sonreír.




Monótona vida

Andando arrastrando un alma a un fin, en calles vacías, moribundas de vida, un paso pesado en este desierto poblado, el pasar apresurado de un lento por venir.

La monotonía de un anochecer y un despertar, saltar a las calle repletas de ornamentos, vacías de sentimientos, llenas de agonía, caminando dentro de tanta gente, sintiendo ausente la alegría, con sólo la rutina de andar y seguir andando, sobreviviendo a todo, pero no a la vida.

El sentir calor, más, no aprovechar la poca brisa, la prisa de vivir sin querer morir.

El alma maquillada con supuestos de una vida feliz, la vida detrás de una sonrisa forjada con el matiz feliz, pero obligada.

El caminar y tropezar con tanta gente que en su vivir carga con tanta agonía, el desvanecer de la vida en nuestras manos, pensando que es normal el sufrir queriendo hacer una vida feliz.

Haciendo de la vida un tic tac de eventos, de situaciones, nacer, crecer, reproducir, morir. ¿Y donde queda tu entorno?, que hacer con el aunque caliente, colorido sol, la triste pero hermosa luna; no volteamos a ver, por ejemplo las flores mover a causa de la fresca brisa, la alegría que se oculta en el cielo azul, la luz que se proyecta en las estrellas de noche, el derroche de hermosura detrás de una sonrisa. La vida es cual capullo de algodón que aunque duro por fuera, si le tomas con detenimiento encontraras el hilo de la sabiduría.

La verdadera belleza la logran los detalles, la vida es un detalle invalorable que esta más allá de nuestra alma, esta en todo lo que nos rodea.




No estamos...

Acabó… sí existió la luz de un sentimiento el viento se la llevó.

Terminó… como alegre lluvia que da retoños a un amor, esta se acabó y el amor murió.

No estoy… el presente dibujado con pétalos de jazmines dorados marchitó.

No estas… las huellas de tus pasos no se marcaron, no llegaron a ser verdad.

La verdad… no se si dulce o dolorosa, no se si sensata o caprichosa, no se si en verdad, es mentira, o verdad.

Del recordar… el tiempo andar, las memorias soltar y en tus huellas caminar.

Y de lo palpado y sentido, el grito furtivo de nuestro amor fracasado, del adiós frió.




Escribir, pensar y sentir

Entre pensamientos y pensamientos y suspiros que se derrochan voy creando fantasías de un papel arando con mi lápiz sentimientos de un clavel.

Hoja tras hoja voy llenando con palabras que guardan un sentimiento línea tras línea exprimiendo tinta roja que sale del corazón como ave veloz que nada en el viento.

Si mi lápiz fuese espada me consideraría un guerrero que lucha contra la luna que lucha por un sueño.

Si mis hojas fuesen espejo como transparente manantial haría en el reflejar sentimientos sinceros con flores de jardín con luceros en el cielo.

Pero como la hoja es hoja y el lápiz no es espada quedarán para sostener aquello que digo y pienso y quien lo ha de leer pueda comprender; lo que siento.




Te vi venir

Te vi… te vi venir, te agarrantes el cabello y te lo pusiste a un lado.

Te vi… tu rostro tan delicado, tu caminar suave, paso toda una vida a mi lado mientras caminabas; oraba por tener aunque sea una mirada, ver tus ojos claros, aquellos que tantas veces contemplaba y hoy me hacen falta.

Llevaba un paso apresurado, como huyendo de la algarada de gente, de repente te vi y fuiste lo único que tuve en mente.

Que haya caminado, no recuero, pero pase a tu lado.




Gota a Gota

Cae una lagrima, cual hoja seca que de un árbol se desprende por causa de muerte, cae como lluvia inerte.

Sucedió… una gota de un sentimiento despilfarrado, un pétalo de rosa arrancado.

Se ha secado, cual sonrisa que de la boca se marcha, con manos que antes de secar ésta, seco algunas otras; nacieron y murieron, como muere un sentimiento, vivieron por sufrimiento y murieron por resignación.

De ojos llenos rebozaron y salieron porque fue necesario, para vaciar un corazón lleno. Lleno de soledad, tristeza y resignación, cual fúnebre dolor.

Su vida fue tan corta tratando de matar un sentimiento largo, que el letargo de su triste existencia trajo como consecuencia muchas más.

Entre una y otra, gota a gota dan vida a la tristeza, matando una felicidad que no volverá jamás.




Fin Final

El inicio del fin será cuando tengas que gritar muy fuerte para salpicar con tus palabras un corazón.

Cuando mirando sus ojos, lances látigos de aire que al alma castigan.

Cuando tomando sus manos, jures ante el sol, sentimientos sinceros que en la oscuridad de tu esencia subsisten.

Cuando arrebatando sus sentimientos con maldad los transformes en bazofia destruyendo así cualquier afecto.

Cuando con ojos cerrados sus manos hacia ti se expandan y rompiendo el vacío no te encuentren.

Cuando buscando una solución, tú cubras la salida.

Y en ese momento cuando no formes parte de su vida y confundas cualquier sentimiento con lo que hacia ti sentía

y tu corazón sientas partir, sin saber reconocer que aquello que tuviste y por no merecer de ti fue apartado, y derrotado te duela mirar hacia atrás, para tratar de recuperar aquello que sintiendo querido fue perdido.

Cuando la hipotermia de la soledad te diga que no volverá; y decidas con dolor ya no ocultar la resignación que te embarga, sentirás el tajante fin cortante acabando lo que a ti fue entregado, y por no valorado ha dejado de existir.

Y ya no formando parte de tus días, el fin concluyente te ha enseñado que apreciado debe ser quien te valora, no dejando ahora de luchar, teniendo marcas en el corazón que no han de cicatrizar, para recordar siempre que el pasado es real.

El fin final será cuando tengas que callar para no salpicar con recuerdos de dolor tu corazón




Porque?

Porque pensar en lo oscuro de la noche y no en lo lindo de una estrella.

Porque pensar en lo caliente del son y no en lo hermoso de un atardecer.

Porque despreciar una espina si puedes amar una flor.

Porque odiar un error si puedes aprender de el.

Porque pensar en hacer las cosas si aun cuando sin pensarlas puedes hacerlas.

Porque querer grandes cosas aun cuando las mejores cosas de la vida son dadas en pequeñas proporciones.

Porque celebrar una victoria aun cuando puedes orar por los caídos.

Porque llorar por la muerte de un ser querido aun cuando nadie muere mientras lo recuerden.

Porque cortar una flor si con ella puedo crear el más lindo jardín.

Porque andar deprisa si puedo detallar lo hermoso que nuestro dios creo para nosotros.

Porque pensar en el mañana si puedo vivir el presente.

Porque pelear si puedo dialogar.

Porque temer a la muerte si no es el cese de la vida, más bien el comienzo.

Porque ver en blanco y negro, si puedo ver en technicolor.

Porque soñar si puedo vivir.

Porque querer ser niño siempre si la sabiduría solo se obtiene con el paso de los años.

La vida esta llena de pros y de contras, lo mejor que podemos hacer es detenernos a pensar en que la vida es una sola, que cada momento vivido es invalorable porque no se repite, cada minuto que pasa es pasado, pero tenemos un regalo de dios que se llama presente, para remendar los errores, para pedir disculpa, para decir te perdono, para regalar una flor, para decir te quiero o para escuchar uno. La vida es hermosa y para disfrutarla al máximo lo primero es no pensar en lo malo, más bien al contrario y veras que todo comienza a cambiar. Si este mundo fue creado para nosotros disfrutémoslo sabiamente buscándole siempre el lado claro a la luna. Vive como la gota de agua que si s derrama no se puede recoger, sin embargo pudo haber saciado toda tu sed; y serás bendecido con la sabiduría de vida.




Lo que el Amor Cuesta

Hubo una vez un corazón que al cruel mundo quiso salir, muchas cosas conoció, pero solo y sin razón quiso huir, en su dolor muchas cosas entendió, como por ejemplo que la razón no se antepone a la suposición, que a veces oscuros días claras noches, que de llantos nacen risas, de días de calor nacen frescas brisas.

Trato de sobrellevar un incierto porvenir y al caminar, pudo denotar que el futuro que pensaba oscuro así como un túnel una salida podría conseguir.

Caminó, y esa claridad que en forma clavel al abrir los ojos pudo ver, le hizo enloquecer, sólo y de amor, según hasta el cielo pudo ver, gracias al cielo gritó, y en su arrebato de amor un futuro como buen pintor pudo dibujar y así con mil golosinas pintar el paraíso que todos hemos de anhelar.

Detesto el haber pensado huir, gracias nuevamente dio por haberse quedado allí y descubrir aquel amor que le hizo sentir que llenaba aquello que la hacia falta y en todos lados vociferaba que era feliz.

Más de todo día de sol nace uno gris, y el engaño como puñal ardiente se hizo sentir y con ojos cerrados ese cruel engaño en sus ojos lágrimas rojas esculpió, su corazón se sentía partir, y ese recuerdo como daga desgarrante en su mente se clavó no dejando cerrar heridas, no dejando de herir.

Su desdicha era tanta que quiso morir, vagante en pensamientos tantos pudo concluir que su desdicha era una estrella que apenas brillaba en una de tantas constelaciones de muchos dolores que se pueden vivir y sentir.

Comprendió que morir no sería solución, estuvo seguro que el tiempo a su sabia medida le podría dar aquello que de tanto anhelar y de muchas cosas bonitas pensar sería la solución a su mal.

Poco a poco reconstruyendo retazos de un corazón en pedazos adelante pudo seguir, juró nunca herir a un amor que le fuese declarado con ilusión y dotado de hermosos sentimiento le fuera entregado.

Y ya sin penas a cuesta, entendió lo que el amor cuesta




Lo que siento

Te quiero… mucho mas que la veces que te he dicho… Te quiero tan verdadero como que en el cielo hay luceros… Te quiero así como el agua que traga el suelo y da vida a flores, sembradíos y fruteros… Te quiero por ser el veneno de mis tristezas por ser mi vida y mi consuelo… Te quiero y es que vivir sin ti ya no puedo… Te quiero tanto que despierto te miro y dormido te sueño… Te quiero y si de mi te vas muero… Te quiero y si estoy feliz eres mi sonrisa y si lloro mi pañuelo… Te quiero y al escribirlo las letras cojen vuelo y en el cielo con nubes y arco iris te recreo… Te quiero, tanto, que cuando sonreír te veo de mis ojos siento celos… Te quiero tanto que escribirlo hasta morir puedo… Te quiero y si quieres repetirlo vuelva, pues, repetirlo puedo… Te quiero y que lo sepa el mundo entero… Te quiero… Te quiero




Te conocí…

Desde que me di cuenta que existías me acostumbre a verte, a sentirte a mi lado, inertemente me fui acostumbrando a ti, tu presencia, tu silenciosa pero penetrante figura, me acostumbre a no pensar en nadie sino recordar que existes; te pienso, no te deseo, pero te tengo; y cuando creo que te voy a olvidar, aparece tu rostro sin gestos, sólo frente a mi, recordándome que compartimos muchos momentos juntos como para alejarnos como si nada...

Me pregunto ¿Qué haría si no te tuviera? Otra persona, que clase, no se, sólo otra persona.

A veces solo te presiento llegar y me alegro de que estés allí, que podamos conversar, que podamos caminar sin nadie más sólo tú y yo. El silencio me habla, tan duro, que no puedo evitar oírlo.

El tiempo ha pasado y no se porque no te puedo dejar; te acercas tanto que te siento, veo tu silueta reflejada en la nada, la negrura de tus cabellos que el silencio agranda, la frescura del aire que en tu transparente existencia llega hasta mi.

Hablo y se que me escuchas, camino y sé que me sigues, lloro y se que tú con tu calma y poder en el tiempo me consuelas.

Sé que nunca llegaré a quererte, pero también que nunca llegaré a odiarte ¿Por qué hacerlo? Si cuando los demás me apartan tú estas allí para seguir formando parte de mi existencia.

Tanto tiempo juntos que ya te veo, con esa frialdad en los ojos, ese conato de sonrisa que nunca borras, con esa calma desesperante que dice que la soledad no eres tú, tú solo eres esa metáfora de compañía que sigue a un inerte pensamiento, una inerte alma, un inerte cuerpo.

Tú "Soledad" que ahora me cortejas, que caminas en la penumbra de una alegría o de un pensamiento, que a veces das discernimiento o tan sólo lo quitas, que palpitas en gotas de silencio de un futuro que ha pasado, más sin embargo allí estas compañía mía, soledad infinita, falta de presencia en sitios poblados, sombra que se proyecta detrás de la alegría y en los árboles de día, eres la división de compañía y la suma de nada. Eres el silencio de un grito que en el vacío de un corazón se pierde.

Si cierro los ojos te veo, si los abro estas allí, me estas volviendo loco, ¿o será que eres tan de mí?

El que me pregunte le diré que eres mi compañía excepcional, quien siempre me entiende, a quien no puedo apartar de mí, a quien odio, pero quien me acompaña.




Fin y No Inicio de un Amor Muerto

Mi silencio habla de ti, mis sueños se realizan al verte, mis piernas caminan al oírte, mi tristeza aumenta al no tenerte.

¿Y cuando a solas me recuerdes?, ya en mi soledad infinita y a ti llegue la desdicha De saber que no te tengo, y tu saber que no me tienes.

Brotaran de tus memorias lágrimas de sufrimiento y cuando el tiempo borre las huellas de nuestro pasado te lastimara no estar a mi lado, te perderás en un eterno recuerdo.

Llegare en un momento inerte a odiarte y abrazar destellos del pasado, tratare de no tropezar con tu recuerdo, borrarte eternamente de mi lado.

No es no quererte es que no me quieras, claro es el sol no la luna llena.

Recuérdame en algún momento sólo como polvo en el viento, como fulgores del tiempo, como tizones que arden en lo que ahora es espacio sin tiempo.

Crearé recuerdos para el futuro y existirán tan dentro de mi que no podré recordarlos ni darles un fin

Me despido de tu boca y no de tus pensamientos no hay porque luchar ahora ni porque decir un lamento mas tu recuerdo será agua, agua que reviva alegrías marchitas en el jardín de mi mente.

Fin de lo que no fue e inicio de lo que tampoco pudo, pasado sin presente ni futuro…



Aun así...

Si ves hacia la luna Y no consigues mi rostro.

Si escuchas el aire pasar Y no escuchas mi voz.

Si caminas por las calles Y no sientes mis pasos.

Si te acaricia el frió de la noche Y no sientes mis manos.

Si cierras los ojos Y no sientes mi presencia. Si caes Y no estoy para ayudarte.

Si lloras Y no estoy para consolarte.

Si ríes Y no estoy para hacerlo contigo.

Si sientes soledad, tristeza, impotencia, alegría o cualquier otra cosa y no estoy; recuerda que no siempre se esta donde se quiere, recuerda que el sol es siempre igual, recuerda que el mundo gira pero siempre se esta donde mismo.

Recuerda que pase lo que pase, se seque el mar, se apague el sol, siempre ocuparas un gran espacio en mi corazón. Nada Cambiará…!




Tu..!

Solo conozco tu silueta que se recrea en mi cabeza, solo conozco tus palabras que susurran.

Te recreo como el haz de luz Que en el atardecer el mar proyecta.

El verte en mí pensar recreada es como verte en el mar pintada.

Tu rostro lo consigo plasmado en la silueta de una sonrisa, lo consigo en el contorno de un pensamiento que no borra ni el agua ni el viento.

Tu… que vives detrás de la luz, delante de la expectativa. Que para yo verte cierro los ojos y mi mente vuela a la deriva, a pesar que no estas, estas conmigo.

Te veo desconocida y en tu incógnita se refleja belleza, tranquilidad, calma y alegría. Como la estela de luz que el sol en el mar dibuja con matiz delicada.

No se quien eres mas sin embargo; eres como esa brisa que siento con frescura en la cara y al abrir los ojos no veo nada.

Solo tu existente ausencia orienta a pensarte lo que no quiero hacer te quiero ver…




Para ti, aunque ni yo lo sepa…

Mis pensamientos engrandecen al tener tu ausencia al tenerte cerca sólo veo tus ojos en lo profundo siento gran enojo de no existir sino mas allá de un saludo mi ser crea duda al pensar que soy mudo.

Vuelo en nubes de azúcar al ver reflejada en mi mente tu sonrisa. Al pensar en ti distanciada en mi mente muy cerca derivan golosinas que los recuerdos crean para saciar la necesidad de tu risa.

Te necesito, no te tengo pero te pienso no siempre te veo, pero tengo tu vibra que germina en desiertos flores y manantiales de agua viva.

Eres impredecible lluvia que moja pensamientos y manos que se escurren en un papel y hace crecer palabras para cultivar sentimientos y cosechar en ti halagos.

Tus palabras crean brisa crean látigos.

Irradias calor como el sol, presencia que aturde el dolor que pausa el tiempo, que a todo da color.

Y si tu nombre he olvidado como quien olvida el olor de una rosa al tenerlo quedara grabado como en una roca que ni el fulminante pasar de las horas podrá borrar de mi boca el pronunciarte de una parte a otra…




Al inicio de ese pasado fervoroso

Derramaras gotas de recuerdos de los espejos de tu alma habrá muerto el tiempo y perdido una esperanza

De caminos recorridos solo huellas quedaran, de árboles florecidos ramas secas, llenas de olvido

De noches de estrellas y brisa primaveral el invierno con su frió todo cobijará

De bellos momentos vividos y memorias de golosina solo fotos del tiempo que se llevó carcajadas de momentos felices que solo se ven con los ojos cerrados para sentirte a mi lado

De recuerdos de inexorable belleza solo quedarán recuerdos solo eso, recuerdos, recuerdo de arena en un mar que todo acaba con implacable furia.

De ti…palabras penetrantes solo golpes del aire que de tu boca salían y el peso al escucharlas y hasta ahora de mi mente no puedo borrarlas. El tiempo muerto, el dolor al pasado, el presente que recuerda, el futuro que no llega

De mi…momentos no existentes palabras en ojos cerrados para no tocar el vació silencio en ojos abiertos para no chocar con el silencio de la soledad el sollozo de una carcajada agonizante el paso de un presente apresurado un presente inerte e incierto recuerdos palpitantes de agonía, en un presente maltratado. el lacerar del pasado.




Ya no está: Una agonía cada vez más grande.

Las campanas chocan al compás del tiempo, el viento seca sus lagrimas de soledad, las manos exentas de vida por su presencia no palpar, y sus ojos estrafalariamente abierto se cierran ante la realidad, gritos ensordecedores que en la lejanía solo su eco responde… ya no esta.

No puede hablar, no quiere escuchar, el sonido de su reloj se hace ensordecedor, ya el tiempo comenzó a crear el pasado de un jardín de tulipanes dorados que la incomprensión y el desamor han destrozado.

La realidad le es sureal y si en verdad existe no quiere vivir más.

En su impenetrable soledad apaga las luces, quien le creyó su vida de sus manos se le va, las lagrimas comienzan a rodar.

En su silencio para si grita, sus manos cierra y sus uñas siente clavar, el recordar aumenta su tormento cual furiosa tempestad.

La oscuridad le aumenta la soledad, pero la luz le aviva su ausencia.

La tristeza se sigue derramando de sus ojos, caen reviviendo en cada gota su agonía, la lejanía de su felicidad se ve cada vez mas cerca llegar… ya no está.

Le busca en sus recuerdos y revive su presencia, no puede vivir sin verle, le cree su esencia, su ausencia es el veneno de su alegría, los decibeles del silencio aumentan su soledad.

Su alma se deshace como las piedras con el tiempo, ya no refleja su triste soledad, ahora puede discernir entre lo que fue, es y será, tal vez mentira, tal vez verdad… ya no esta.




La luz

El reloj muy puntual anuncia la hora de dormir, no me puedo desvelar no se puede permitir.

Inevitablemente ha llegado la noche.

Que hacer para evitar el miedo que me embarga esa oscura habitación, algo debo hacer necesito una solución, el pensar en la oscuridad me opaca el discernimiento, el advenimiento del momento de ir a ese oscuro lugar.

Ya se…! el bombillo encendido para espantar la oscuridad serviría, pero “con la luz encendida no se puede dormir” reclama la mayoría.

Ya acostado veo hacia los lados, no sabría decir si mis ojos siguen abiertos o están cerrados, mi cobija utilizo como fuerte escudo en contra de los demonios que mi mente crea con el cuarto ya oscuro, el sueño se acerca tan sigilosamente que no le veo llegar.

Al despertar el duro golpe de la luz en mis ojos, la noche se ha retirado pero con las horas volverá a su antojo.

El tiempo anuncia en el reloj la rutina de las horas, que puedo hacer ahora si la noche se ve llegar, creo tener la solución, espero pueda funcionar.

Asechante ya la hora de dormir, un libro cualquiera he tomado no podía elegir, al este abrir la luz no se volvió a apagar, jamás volvió a ocurrir.

“Si el va a leer la luz no se puede apagar” decía imponente mi mama.

Ventajosa mi situación. Mientras que por obligación las paginas de este libro leía, y así la luz se apagara eternamente estaría encendida. Descubrí una solución.

El interruptor encendía la luz del conocimiento en cada hoja leída. La oscuridad no volvió a molestar, aun cuando mis ojos cerrados nada leían, el discernimiento alumbraba en cada momento todos los rincones de mi vida.

La lectura fue la antorcha que acabo con la ignorancia que esta aun más allá de mi habitación; está en la oscuridad de aquel que no busca la luz del discernimiento, de la vida la razón.




Adiós

Látigos de momentos ya vividos golpean tan fuerte que las heridas no cicatrizan y queda la marca de tu olvido.

Y te vas, dejando palabras que golpean, haciendo de nuestro presente un pasado maltratado, con un frió adiós atado.

Te recordaré, inexorablemente lo haré, tu presencia la dibujare solo de bellos recuerdos vividos.

De mi, hasta los sueños sin usar te di, mis anhelos, mis huellas sin marcar, mis pasos firmes sin andar, el sonar de mis latidos llenos de ti.

Fui la gota de felicidad que derramaste de tu vida y no podrás recoger, tal vez con ellas hubieses saciado tu sed de alegría.

Ahora solo serás esa foto en el baúl de los recuerdos que ni querré ver, serás solo referencia a un cariño que has matado, que tu incomprensión y desamor han acabado, ya no estoy a tu lado. ¿Seguro ahora eres feliz?, ¿o has errado?

Se ha marchitado una flor, pero la vida es un jardín, no eres necesaria para mí, puedo vivir sin ti. No serás la nube que opaque mi luz de alegría, ni tampoco mi agonía. Hasta nunca… te dejo ser feliz




La vida sin amor

Una semilla es insignificante si hablamos de cualquier árbol, pero no el de la felicidad y el amor; y es que cuando se siembra, la esperanza de su frondosidad son muchas, pero la lucha por sobrevivir debe ser constante, debe ser regada con cariño y comprensión, el amor si se descuida rápido marchita, mas si es cuidado las fronteras son mas pequeñas que las líneas de las manos, y lo que parece imposible el amor lo hace posible.

No importa lo alto de la montaña, ni lo profundo del mar, no hay lugar, sitio o rincón donde el amor no pueda llegar, para él dificultad es sinónimo de meta y antónimo de imposibilidad y es que la vida sin amor no es real.




Te llevo conmigo

Te llevo conmigo… como el negro cabello que corto y vuelve a crecer.

Como el nacer y morir de un día y al otro día se ve amanecer.

Como los pensamientos de un ayer.

Como mis ojos que no te pueden ver.

Te llevo conmigo… como la lluvia que se deja caer y hace las flores crecer.

Como la luna su madurez y el pasto su reverdecer.

Te llevo conmigo… cual niño su inocencia, y aun cuando no tengo tu presencia, te llevo conmigo.




Existir

Estar es saber que somos aquello que vamos forjando al andar.

Los días pasan y las huellas se van creando en nuestras vidas, un sol y una luna que nos envuelven, alegrías y tristezas que nos enseñan, el silencio y el movimiento de palabras que en el aire vuelan, miradas que dejan de existir, un inicio o tal vez un fin, el existir o el aparentar ser, el querer y desvanecer del sentimiento, caminos que al recorrer vamos creando, días que al existir van muriendo y simas que día a día vamos subiendo o de las cuales vamos cayendo, presencias y ausencias como metáforas de una vida.




Te odio

Te odio, por mis ojos no ver tu presencia, por no sentir el calor de tu aliento, porque mis lágrimas no las seca el viento, porque aquello que siento se va al abismo del olvido, porque no puedo tenerte cerca.

Te odio, por ser aquello que amo como las aves al viento, mas sin embargo hasta su muerte se mantienen en vuelo como aquel lucero que en la noche veo y te recuerdo.

Te odio porque olvidarte no puedo, aunque no se si realmente quiero.




No podré

No, no podré, tu presencia no la puedo borrar, te veo hasta en la oscuridad, estas hasta en mi soledad, tus profundos ojos, tu ondulado cabello, tu caminar.

No, no podré, tus recuerdos acarician los restos de mi alma que dejastes al desvanecer, al aparecer tu ausencia se marchan mis verdades.

No, no podré, tu aroma no se va, el tiempo y el viento me dicen que aquí estas.

Tus recuerdos son mínimas gotas que mantienen vivo este manantial, no, no te he de olvidar…

Aunque dure un Instante

Aunque dure un instante, pasaría toda una vida por mis manos si pudiera tocarte.

Aunque dure un instante el momento en que mis ojos te contemplen y mis manos tiemblen como ondas de mar, en esa eternidad de un pequeño momento, no me sentiré vivo ni tampoco muerto mientras mis ojos puedan mirarte.

Aunque dure un instante rosas rojas nacerían si te viera sonreír; y es que te puedo sentir en mis pensamientos, en la brisa que llega hasta mí, en cada paso que doy, en cada suspiro, despierto o dormido pienso en ti, si pudiera besarte, aunque dure un instante y te vallas de mí.




No a la guerra

Los pétalos se queman como las alas de aquella ave que el cielo cruza, al mar las balas caen así como la muerte pasa a formar parte de la vida, al suelo mucha sangre cae y en el aire solo gritos, miedo, odio y pólvora se huele con sinónimo de paz, la alegría es solo una palabra fugaz que no concuerda con la realidad, armas bombas y la lucha por el elixir negro son signos de que la guerra no acabará.

Ahora sabemos que el futuro si esta escrito en las piedras, a quienes les dimos la potestad han convertido nuestro planeta en guerra el planeta pide paz.




Recordar

El presente es recordar que a mi lado no estás; y el fututo es recreado con retazos de lo que tus ojos me dan cuando fijamente te miro, te siento, pero no estas.

Que es quererte si a mi lado no estas, el buscarte significa no encontrarte, el pensarte no tenerte, el saber que estas ausente.

Perpetua tu presencia en mi mente, miento al pensar que no estas, tu presencia no me das y mendigo al pasado tus manos para que me abrasen fuerte.

Palabras revolotean en mi mente con el frío ardiente de la soledad, te escucho hablar, puedo hasta sentir tu mirada y temblar con la profundidad que ello genera, pero no estas…




Si te tuviera Si algún día la dicha tuviera, de abrazarte y poder reflejarme en tus ojos mataría el tiempo o le congelaría, apartaría las nubes del cielo para que dios te viera, nacería mi dicha si realmente pudiera tenerte entre mis manos así como una rosa, amarte como a ninguna otra quisiera...




ERES…

Del jardín una flor de cristal

Del cielo el mas grande lucero en su infinidad.

De la belleza gota de agua en un clavel.

Del mar su infinita belleza.

De la tristeza una sonrisa de felicidad.

Del dormir el mas lindo sueño.

Del despertar el sol relumbrar.

De la luz su brillo perpetuo.

De la soledad la mejor compañía para en ti pensar, y el tiempo congelar.

De la alegría el contorno de su existir.

Del majestuoso desierto tu rostro grabado en cada grano de arena.

Del amanecer el resplandecer de tu sonrisa.

Del pasado presente y futuro tu imagen grabada como en el mármol duro.

De la vida eres el más bello jardín, el azul cielo donde las aves juegan, la belleza reflejada en ti, el profundo mar en tus ojos, la tristeza que al llegar acabas, el dormir para soñarte, el despertar para pensarte, luz para verte, soledad que piensa en ti, alegría creas tu, desierto cuando no estas en mi, el amanecer para vivir el presente, pasado y futuro que habla de ti…




El final

Mentira de un inexistente cuerpo ciego ante la realidad de sus pasos.

Circunstancias que las metáforas crean en sí con fin de una vida.

Sus palabras se asfixian al ser creadas.

Latidos sin sonido de vida, vacío palpable en su inmensa soledad.

La realidad de aquello que murió en el tiempo, que ya no existe, el presente que sus ojos vieron quemar mientras rodaban por sus mejillas la agonía que precede el final




Día a día

Turbia su mirada hacia el cielo infinito abrazando destellos de luz reflejada en su tristeza, su silencio es calma ahogada en un grito.

Frío etéreo que comprueba su ausencia, pero cuando sus ojos cierra, su presencia se calca como marcas de cincel en piedra.

Teme que el olvido le destruya sus recuerdos y se aferra a las huellas de aquel presente que el tiempo a matado. Su alma ata al pasado como parte de sus días, lo que fue presente lo recuerdas con saldas vivas de su triste ausencia, creando día a día metáforas de una vida.




Me pregunto…

¿Qué tan largos son los días?

¿Qué tanto podía hacer con mi vida si no te conocía?

¿Qué tanto podía pensar si no existías?

¿Qué tanto podía hablar si de mi boca tu nombre no salía?

¿Qué tanto podría caminar sin tu compañía?

Ahora no estoy seguro si antes de tu llegar a mi vida yo existía…




¿A dónde?

¿A donde va el sentimiento? ¿A donde va el motivo por el cual lucha el guerrero?

¿A donde van esas palabras que no se trago el viento? aquellas que son para toda una vida, y duran solo un momento.

¿A donde va su sonrisa de blanco marfil? o ¿que camino llevan las huellas que no se borraron de la arena, esas que puedes sentir?.

¿A caso el tiempo muere?, ¿o le matamos a cada momento?

¿A donde va su mirada cuando no le puedes ver?

¿A donde va el brillo y la alegría del clavel?, acaso va con el caminante, ese ciego en el camino, ¿¡A dónde!?

¿Donde guardar las caricias?, esas que lo amantes no se dieron, ¿a donde fue su imagen?, esa que siempre conseguías en el cielo y dibujaban las rosas con sus pétalos en el suelo.

A donde va esa lágrima que rueda en sigilo, o ese verso enamorado que resignado se lanzó al vacío.

Donde colocar eso que no tengo y quiero, en verdad, tendrá un limite el cielo, pues si es así no lo quiero, a donde ir con su recuerdo, tal vez al mar, y hacerle a lo profundo nadar, que hacer con soñar y no poder vivir, será mejor los ojos abrir o en la densa utopía morir.




A mi Universidad

La lucha por tus ideales es más que una disputa o altercado merecedor de destrozos. No dejes que opriman tus derechos, pero, ¿acaso los demás no los tienen?, lo que miles de manos crean sólo muy pocas destruyen, y en muchos casos en nombre de quienes no concuerdan con ello y sin embargo sufren el que les adjudiquen “delincuentes universitarios” sin que lo merezcan.

Si las pedradas, los destrozos, los golpes y la ira enseñan, entonces, ¿porque usamos marcadores o tal vez tiza, pizarrones, y libros o guías?, ¿Por qué un cuaderno en el morral si con piedras o palos, nos podemos superar?, ¿acaso con ese fin Newton estudio la gravedad?

No conservemos, si la solución es destruir y amedrentar. Es cierto lo de tu libre albedrío y el que puedas luchar por tu universidad, aun así, ¿crees conveniente dañar, en varios sentidos, a los demás? Y no digas que es en nombre de los derechos que como estudiante tienes, o tal vez, “es necesario para que nos puedan escuchar y nuestros problemas solventar”.

“Estudiantes universitarios destrozaron, saquearon, secuestraron…” son los títulos que el periódico mayormente muestra referente a nuestra universidad; no sé si se quieren tildar de delincuentes, pero hay quienes venimos a estudiar, con problemas personales, académicos, con deficiencias y tal vez, muchos o solo pocos factores que nos puedan afectar, pero día a día salimos a la universidad, si regresamos con un 5, pues mañana vamos por el 10 y día a día volverlo a intentar, hay quienes luchamos sin pretender desmayar, la distancia no suele ser problema para quien de lejos viene a estudiar, “DEL PUEBLO VENIMOS Y HACIA EL PUEBLO VAMOS” palabra insigne por la cual luchar, entonces ¡a trabajar! (o en nuestro caso ¡a estudiar!), si somos el futuro del país, con piedras, huelgas y destrozos nada bueno vamos a lograr. Si somos “LA CASA MAS ALTA” espero que no sea por lo duro que caen las piedras desde nuestra universidad.

Una cosa es luchar por tus derechos y otra muy distinta es irrumpir en los derechos de los demás.




20 minutos

Me senté a tu lado y no pude denotar el tiempo caminar, observaba los demás carros velozmente pasar, y por la acera marchaban muchas personas, algunas en compañía, algunas a sola, si te observaba a mi lado simplemente agonizaban los segundos, los minutos, las horas.

Me senté a tu lado y me preguntaba porque camina el tiempo, porque debía morir aquel momento, y sin poderte contemplar no mas de un instante, sólo podía calcar en mis parpados tu perfil. El tiempo apresurado por querer morir, me preguntaba si le faltaba poco para llegar a su destino, me preguntaba si algo le podría decir, me preguntaba si pasaría a ser parte de mi destino.

El sonido de la música, el ruido de los vehículos y el humo que producían, nada, nada de esto existía, toda mi atención estaba sentada a mi lado, y nuevamente le veía, con timidez en mis pupilas que rápido disimulaban, pero solo ese instante bastaba para alegrar mi día.

¿Alguna otra vez le he de ver? Si. Su imagen siempre estaría, he de recordar el horizonte de su rostro, el ardentía de sus amarillos cabellos, el sol dibujado en sus ojos, y todas las tardes frente al mar le recordaría.

Impredecible como es el futuro me ha dado la noticia que ha su destino a llegado, debo apartarme de su lado para que se pueda bajar, una mirada mas le recorre entera, inmutable mi silencio sólo se tira al vacio, estaba soñando estando seguro que no estaba dormido.

Al darme la espalda con una mirada me despido, sigo mi camino recordando 20 minutos que aun no he olvidado y entre estas pocas líneas e plasmado, no quedará en el olvido, me llevo sus cabellos rubios, sus ojos claros y un corazón vacío.




La larga espera

Se impacienta su alma por la larga espera, la soledad a su lado cobija una sonrisa que en silencio le desespera. A lo lejos extiende su mirada, pero aun no le puede ver, el tiempo pasa lento como contando sus pasos, mientras a su alrededor el mundo camina apresurado, aun no está y necesita su presencia, le quiere a su lado.

No encuentra que pensar, solo se pregunta ¿Por qué aun no llega? En su espera mucha gente ve pasar y en todos lados imagina ver su presencia.

El tiempo en su reloj ve pasar y esto le inquieta, mientras sus manos unidas siente sudar, no puede tenerlas quietas.

No sabe si su imaginación aun crea siluetas o en verdad ve su presencia cerca, sus manos seca y es una sonrisa lo que se ve nacer, a muerto la espera pues así tenia que ser.

El tierno saludo que va unido a las miradas se puede ver, y se escapa una pregunta: “¿te he hecho mucho esperar?” –No, para nada, acabo de llegar.




En sueños y vida

Otro sueño que olvido, pasan los días y no caigo en recuerdos, será verdad que vivo y muere el recuerdo en el pasado, o tal vez e soñado algo que no he vivido.

Otro sueño que vivo, pero ¿Por qué no recuerdo? Que habrá pasado, será que abro mis ojos, o en ese momento los estoy cerrando

El tiempo es un ave veloz que atraviesa el mar del destino, forjando en su vuelo fuerza en su alma y olvido en su trino.

El sueño una vida paralela de miles e infinitos caminos, alegres caminares y tristes derrotas, sucesos que al abrir los ojos tal vez hubiese sido mejor dejarlos descansar, se ha olvidado, por mas que quiere recordar.

Tal vez vuelas, o solo amas sin ojos de juicio, tal vez solo ríes en la punta del precipicio o simplemente no existe la pena, el vicio no es un círculo y vives por solo horas, minutos o segundos una vida plena.

Otro sueño que persigo, la vida son solo pocos instantes que plenan un alma vacía, será que el letargo del sueño forma parte de la vida o solo vivimos un sueño en una mínima savia.




No te he de olvidar

El verte es sentir que estas lejos, tu presencia se va, aunque te puedo palpar en mis recuerdos, tu presencia no está, aun así no te he de olvidar.

El silencio se acerca tan sigilosamente que sus pasos retumban en mi alma y el cauteloso olvido me recuerda que no estas conmigo, me atropellan cual furia de un astro estelar y aunque mis heridas no sanarán, el sentir en ellas el rojo color de tu ausencia hace que tu presencia no se extinga jamás.

Detesto aquello que siento cada vez que tu ausencia llega hasta mis ojos y mis manos tocan tu piel en la plena soledad, aun así, no te he de olvidar.




Y Vivimos

Y vivimos… muriendo en cada huella guardada por el presente y borrada por el pasado, marcando en la tristeza los sentimientos mas puros, donde la risa, choca con la vida y su eco es el llanto; donde las flores crecen para adornar con pétalos marchitados el campo, y expira la alegría que un día se guardo, y la agonía pasa a formar parte de cada vida, donde no sobrevive el mas fuerte, sino el que resignado cobija en su alma el renacer del día a día para seguir luchando.




Crónica de una salida

Camina hacia el balcón y la suavidad se refleja en sus pasos, sus ojos de rojo color tocados por unas lagrimas ven la ciudad cobijarse en la neblina, con la misma serenidad siente gotas frías por sus mejillas rodar y en la vieja madera con la naciente luna se ven como estrellas brillar sin emoción alguna.

Bebe de su copa rota, lo único que por instantes calma su agonía, deja en cada trago rojas gotas llenas de recuerdos, recuerdos que plenan su dolor que acaban poco a poco con sus días.

Se desvanece en la oscuridad de sus pensamientos, su cabeza alzada al cielo saboreando su desconsuelo, bebe nuevamente de su copa transparentemente casi vacía lo que queda del elixir para el sufrimiento.

Se oculta en la esquina del balcón cobijándose en la madera fría, siente latir poco a poco su corazón que se resigna al dolor, que se resigna a la caída.

La copa levanta y le hace volar contra la pared quedando en el suelo pedazos de vidrio parecidos ha lo que queda del corazón aquel.

Toma del suelo pedazo de lo que fue una copa le observa como observa la vieja ciudad que siempre le fue tan ajena.

Siente nuevamente por sus mejillas como corren sus penas, su alegría apenas se reduce a la oscuridad que reside en aquella enorme ciudad.

Contempla con tristeza y resignación el brillo de las estrellas, siente tan poca la vida como la luz que irradian los faroles, como el brillar de la luna aquella que por inercia no deja de contemplar.

La brisa con sumo dolor le aviva el sufrimiento, no saca de su pensamiento lo que queda de la copa rota, se relaja asumiendo la derrota que poco a poco y que una gota tras otra le van consumiendo.

Vislumbra con detenimiento el filo casi transparente que detiene entre sus dedos, cual apasionado pintor traza con detenimiento aquella línea que tiñe de rojo su mano y hace de su corazón un latir lento.

El tiempo jugando con su agonía sonríe a aquel momento y hace de su andar un caminar lento, no refleja sus rostro algún sufrimiento, sabe que si se levanta lo ha de intentar otro día, para que postergar la venida de aquel momento.

Su tristeza ha salido y tiñe de rojo el suelo, hasta el viento ha tornado de otro color, el frío envuelve aquel balcón y embelesa la luna su rostro de blanca pasión.

Siente como se escapa la vida de su interior, sus lágrimas ya no ruedan mas pues, no existe el martirio del día a día, su alegría ya le dijo adiós, ahora es su corazón quien despide con lento ademán su marcha de dolor.

Sus ojos poco a poco se van cerrando así como el atardecer lentamente le da paso a la noche fría, y se ausenta lo que muchos dirían fue una vida, pero para este ya fallecido ser solo fue agonía entre sus tantas falsas sonrisas y un enorme padecer...




Aquí Te Espero

En esta esquina fría, en este duro suelo, con estas manos aun vacías y en la noche bajo el oscuro cielo.

Porque el frío solo llega si no estas conmigo, y es que si no estas mi lápiz no tinta, y para verte mis ojos se ocultan en el sueño.

Como espera el verano al invierno, como espera el pescador con su orgulloso anzuelo, como admira el poeta el horizonte en su atardecer el sol caer y volar la luna al infinito cielo, como espera el trovador que nazca la rosa, como espera aquella boca el anhelado beso, como el marinero espera su puerto, como espera la utopía a que nazca el sueño, como espera aquel farol a que pase el aguacero, como espera cualquier amante vida mía, como espera, aquí te espero.




Te he de encontrar

Te he de encontrar, no tengo un camino para buscarte, mas, se que allí estas, las estrellas serán mi guía, la luna me seguirá en su desvelado camino y el sol me dará su brillo.

En algún lugar debes estar, recorreré el casi infinito mar, por la superficie o en su profundidad, revisare coral por coral, en cada estrella de mar, en cada grano de arena que la profundidad no ha logrado mojar.

Le preguntare al camino si te ha visto pasar, al viento que tu rostro a tocado, a las agonizantes huellas que ya morirán, les preguntare por ti, si te han acompañado.

Si vives en mis sueños tienes que existir, si te puedo soñar en algún lugar debes estar, te puedo sentir y si es así viviré para caminar, volar o nadar, el infinito no tendrá final, y si allá estas, no me he de cansar, te he de encontrar.




Si has de marchar

Hazlo ahora que verdes aun son las hojas que no pierden su brillo, hazlo en sigilo, que no sientan mis brazos la soledad de tu olvido.

Si has de marchar, no te preocupes yo seguiré recorriendo el camino, aunque sin tus huellas me siento perdido.

Si has de marchar, no te lleves mis suspiros, pues me harán falta cuando bajo la triste luz de la luna, se hagan secar mis lágrimas en el tiempo y sean mis suspiros el único ademán que quede hacia ti.

Si has de marchar, no esperes de mis ojos olvido, quedaras como el cielo estrellado al cual siempre miro, en la sombra del espacio que dejas vacío, en el beso enamorado que resignado a muerto de soledad, pero si en verdad has de marchar, déjame un eterno abrazo con el cual me he de cobijar, una mirada que mienta amor, una caricia obligada, unas palabras sumergidas en falacia diciendo que volverás.

Si has de marchar, realmente no lo harás, quedaras en el recuerdo, en mis manos vacías, en mis ojos que luchan por mantenerse cerrados, para mantenerte a mi lado. . .




Dime

Te consigo en cualquier sonrisa, dibujada en las estrellas, en las curvas de mis rosas de papel, en el olor que desprenden cuando pienso en ti, en lo que me haces sentir cuando al despertar de mi utopía me doy cuneta que no estas aquí y esperar otra noche para que tu ausencia se aleje, y volverte a sentir.

¿Acaso me has de recordar?... ¿o si tal vez mientras tus labios besando los de otro, algún destello del pasado me ha llevado ha tu lado?

¿Conservaras mis poemas donde nadaban las palabras aquellas que nunca deje de decir?

¿Acaso desde tu cama recordaras esa sonrisa que siempre compartíamos o esa mirada que aunque callada era lo mejor que podíamos decir?

Respóndeme desde tu ausencia si al escuchar aquella canción se recrea mi presencia en ti.

Dime si ya me enviaste al baúl o cuelgas día a día mis palabras al sol para que no puedan morir.

Arranca esa seguridad que tengo de pensar que me has olvidado, o al menos asegura que aunque en vano, guardas con recelo y muy ocultado aquel amor que te di; dime que aunque marchitado guardas sus pétalos secos entre las hojas de algún cuaderno en el cual ya no quieres escribir. Aunque no estés dime si de vez en cuando piensas en mí.




No tengo una lágrima más para ti

Con tu ausente aroma pasan las horas y pienso en ti, tengo mil y un palabras por escribir, pero ya no tengo una lágrima más para ti.

Y ha sabiendas que no estas a veces me haces sonreír, y si el recuerdo me trae un día gris, aun así no tengo una lágrima más para ti.

El tiempo no causa olvido, no este se da con el tiempo, el suspiro derramado aun cuando lo seca el viento deja una huella que por muy invisible sigue viviendo, y recorriendo el paso de los días se puede sentir, aun así, no tengo una lágrima más para ti.

Y si te nombro entre mis días es porque te llevo escondida en las miradas vacías, en mis noches y mis días, en los pétalos de las hojas caídas.

Puedo mentir y decir que te he olvidado, ignorar la imagen de ti que creo en todos lados, decir que no me duele el que no estés, ver otro día amanecer y buscarte en los espacios que llenaba tu presencia, pero hoy me doy cuenta que tu ausencia es una metáfora, aun estas aquí, aun te puedo sentir, aun hablo de ti y siempre vivirás en mi, aun cuando ya no tenga una lágrimas mas para ti.




No es poesía

No es poesía, esa mujer que mata mis utopías y que llena de palabras todas las líneas de este libro que me guía por el día a día, no es poesía.

La poesía no existe, solo es el reflejo de una vida de una lira, de un evento, de una fantasía, solo existen las palabras, la luna con sus estrellas, el sol con su destellar las huellas que quedan en la arena y el agua que se las lleva, existe la rosa que mojada de rocío es una musa para cualquiera que de ellas se quiera adueñar, pero no existe la poesía.

No existe la poesía puesto que no puedo robar de sus ojos la infinidad, no existe sino puedo su mano tomar y guiar la barca de mil fantasías en el infinito mar, si no estas, que luna va a brillar en su desvelo triste, no, la poesía sin ti no existe.




Tú y yo

Quiero comenzar y volar en tus brazos que son como la arena mojada de mar.

Mojar tus labios en los míos y verlos como los pétalos de aquella rosa impregnada de rocío.

Tocar tu silueta en la noche espesa en la que en el tejado un gato enamorado le canta a su luna mientras en tu cuerpo se estrellan luceros y una gota de amor hace que nuestros cuerpos se unan y dejemos de ser dos.

Tener tus pensamientos y dejarlos entre mis dedos correr, y de tus ojos poder beber la dulzura que tus palabras dan con calor cuando tus brazos me dan del paraíso la dirección y camino en las huellas de tus besos y ya no existe mas nada que no pueda llamarse amor.

Quiero comenzar a crear un universo solo para los dos…




Un Mundo

Quisiera pintar los sueños de azul y el cielo de negro y abrirle millones de agujeros, no llamarles estrellas, sino pensamiento y dejarlos volar en lo infinito del tiempo.

Que el sol pintara de amarillo solo la conciencia de aquellos que tienen oscuridad en su corazón, hiciera de las rosas regar su hermosura, y de amor llenar todo rincón, toda la azúcar del mundo vertería en el mar y endulzar en planeta con sonrisas, abrazos y felicidad, enviase a la escuela solo a aquel que no sabe sonreír, que puedan aprender que si vale la pena ser feliz.

Si pudiera, nadarían en el mar, solo los buenos deseos que vagan por el mundo, haría del llorar solo un lugar donde al entrar entregues vuestra tristeza y en recompensa miles de envases llenos de felicidad.

Adornaría los caminos con dulce de higo y piedras de almendra y chocolate, estrellas fugaces acompañarían el andar y el destino seria solo un dulce que saboreamos antes de llegar...

Colocaría bancos de esperanza en cada esquina y de regalo un poco de optimismo, un mundo donde el color sea sinónimo de alegría y arco iris, un mundo sin carencia, podredumbre y dolor...



¿Donde está?

Será que se ocultó.

Será que en oscuro túnel su luz apagó.

O será que simplemente estos ojos no le pueden ver ¿A dónde fue?

Le he buscado en cada rincón de la luna, debajo del mar y detrás del sol.

En cada hoja caída, en cada rastro de lagrima vivida, en cada suspiro cual lobo a su luna, conté las estrellas una a una y no le pude hallar.

Quise callar a ver si le podía escuchar, grité muy fuerte a ver si respondía, le busqué de noche, le busque de día, solo el vacío existía, cada paso una agonía, y no le pude hallar

He escuchado que existía y me pregunto si ya acabó, no le puedo ver, aunque a veces sueño con él y metafóricamente nace mi alegría. No; Definitivamente no es una utopía.

¿Ha donde fue? He visto el amanecer, el tardecer y anochecer el alegre día, más, no le he podido ver.

Se donde esta la luna en su noche fría se donde esta el sol con su alegre fulgor, se ha donde van los días, pero, no se donde esta el amor.




Estas aquí.

Estás aquí... y tu presencia se hace sentir con la brisa de diciembre en el rojo vino que derramado en estas hojas deja ver tu silueta en la luz noctámbula que menosprecia tu brillo en el oscuro cielo, en la luna esbelta

Estás aquí, en las horas que esperan sin resignación que aparezcas en aquello que respiro y no tiene tu calor en mis huellas que no encuentran un camino en el ruido aquel que conviertes en canción


Estás aquí…

Estás aquí, pues mis letras hablan de ti mi cama susurra tu nombre antes de dormir mis ojos te saludan en todas partes, y aunque no pueda encontrarte

estás aquí...




A tu distancia.

Oscura la noche que me desvela, como el develo de una flor marchita que no duerme, oscuro mi silencio triste, silencio que vuela al infinito y muere.

Sigo tu recuerdo como se guía el navegante en el mar, sigo tu perfume que ha muerto en la soledad. Allí estas y no te puedo tocar, ¿y si este mundo no es real?

Y si vivo muriendo en la agonía de las horas y los días, ¿serás tu eso que me arrebataron mientras dormía? ¿Por qué no puedo ser feliz sin poderte pensar?

Perturbas aquello que me dieron por real, haces metáfora una vida, si estoy seguro que no existes que no formas parte de mi vida, entonces, ¿por que no me resigno a vivir sin tu compañía?

Me aferro al dolor de tu partida, tus fotos, tu imagen en mi cabeza, aun te espero y no veo tu silueta, ensayare mis poemas, por si regresas.




Para ustedes.

Para quienes llegaron y para los que vienen.

Porque el pasado me dibujo tu apariencia y el futuro mas compañía y aunque exista distancia y añoranza de tu presencia, se que como esa luz de estrella nunca te apagaras de mi vida.

Para quien me da su sonrisa y me contagia de alegría. Para quien en sus saladas vivas me hace volar a su lado o acude a las mías.

Para los brazos que me han dado calor y para aquellos de los que solo recuerdo un ademán de adiós.

Para quienes tengo a mi lado y para los que ya no están, para quienes vienen, para quienes van, GRACIAS por cruzarse en mi camino, y enseñarme a caminar.

Una vida sin amigos, una vida sin ustedes, no seria real.



--pavhlo 00:19, 29 March 2009 (UTC)